Todos somos bestias, animales de nacimiento, nos domesticamos con la vida y nos amilanamos mientras envejecemos.
Yo quisiera ser bestia hasta el final de mis días. Una bestia que ama a rienda suelta. Una bestia que dice lo que siente. Una bestia que siente. Quiero ser una bestia que no le teme a la palabra Sí y que sabe decir No. Una bestia que toma lo que quiere sin titubeos. Quiero ser bestia hasta morir, para no olvidarme de mí, para no perder mi esencia.
Y si me equivoco, me equivocaré por bestia, completa y absoluta.
Sí, soy La Bestia.
Soy transparente.
Me puedes oler muy bien.
Desde que me presento,
No tengo que hablar para darme a entender.
Mis ojos te lo dicen todo.
Mi boca arrulla lo que pienso.
Sabrás que es lo que siento,
Con sólo tocar mi piel.
No muerdo, ni acaricio.
Sólo hiberno todo el tiempo,
En mi jaula de almohadas,
Dónde nadie sabe la verdad.
No tengo voz para decirlo,
Por eso vengo y te lo escribo.
He deshonrado a mis principios.
Nunca he tenido la furia de un león.
Siempre tomando el camino corto,
Como él me enseñó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario